Crítica musical: Dethroned & Uncrowned de Katatonia

Hoy toca vestirnos con nuestras mejores galas, mi estimado lector constante, pues tenemos el inmenso placer de recibir en el blog de Yago a uno de mis grupos fetiche, los suecos Katatonia, que nos presentan su último trabajo, el glorioso Dethroned & Uncrowned, una reinterpretación acústica de su aclamado anterior disco Dead End Kings de 2012. Enarbolando una vez más la bandera de la melancolía y la tristeza como solo ellos saben hacer, alcanzan en este álbum unas cotas de intimismo e introspección como nunca antes habían conseguido. Uno de los mejores discos que he escuchado en años, con el que estos magos de la depresión traspasan finalmente todas las fronteras con su logarítmica evolución musical. Si es cierto eso que dicen de que el alma humana puede llorar, a buen seguro las 11 canciones que componen esta bellísima oda a la tristeza representan una perfecta materialización de ese llanto etéreo.

 

A finales del pasado 2013 Katatonia sorprendieron a propios y extraños con este Dethroned & Uncrowned, una reinvención de su anterior disco Dead End Kings lanzado en agosto de 2012. El disco fue financiado en parte mediante una de esas iniciativas de crowd-funding tan de moda hoy en día, en la que los fans hacen aportaciones económicas para que el proyecto salga adelante, y editado por la discográfica hermana de Peaceville Records, Kscope. Las canciones en ambos discos son las mismas con un orden diferente, pero para esta maravillosa reinterpretación se han visto despojadas de distorsión, bajo y batería. Las mismas canciones, desnudas, interpretadas en versión acústica, con una deliciosa nueva capa musical en forma de unos soberbios arreglos de piano y cuerda, que con la colaboración de unos ligeros sintetizadores crean una atmósfera completamente nueva. La única constante con respecto a Dead End Kings es la maravillosa voz de Jonas Renkse, que con su hipnótica y seductora melancolía logra llenar todos los huecos que dejan los elementos que no están presentes en esta nueva versión. De principio a fin de disco, el señor Renkse realiza una soberana exhibición vocal. Su voz es la estrella indiscutible de este maravilloso disco, una constante caricia de oscuridad y tristeza que ofrece infinidad de registros en una interpretación simple y llanamente sublime. Con este último lanzamiento los genios suecos dejan definitivamente atrás toda etiqueta, en un alarde musical sin igual. Si ya era difícil catalogar el estilo que practicaban en anteriores discos, lo que aquí nos presentan es simplemente un conjunto de canciones de bellísima e impecable factura, un canto a la tristeza y la melancolía en forma de soberbia delicatesen acústica, creando una atmósfera densa y tan rica en detalles que invita a escuchar el disco una y otra vez para descubrir los infinitos matices que sazonan esta alegoría de la introspección. Y todo ello coronado por un Jonas Renkse completamente desatado, sublime a las voces, no hay cantante con un registro tan evocador y personal como el suyo. Todo ello conforma uno de los mejores discos que he escuchado en muchísimo tiempo, y que como mínimo se sitúa a la par de las dos obras maestras de la banda, los colosales Last Fair Deal Gone Down y Viva Emptiness.

 

 

Esta oscura joya musical comienza con The Parting, en la que ya desde el inicio queda claro que Jonas Renkse va a ser el protagonista del disco, memorable a las voces desde el pausado comienzo de esta bellísima composición que abre el disco, y en la que también desde el principio vemos la importancia y la gran presencia que va a tener el piano en esta obra. Un canción preciosa con un estribillo donde la conjunción de las guitarras acústicas con los teclados brindan un fenomenal apoyo a la voz de Renkse. En el segundo corte nos encontramos una de las gratas sorpresas del disco, con un maravilloso dueto vocal entre Renkse y Silke Wergeland, la cantante de The Gathering, creando una preciosa dicotomía entre la voz masculina y femenina. En Hypnone nos encontramos uno de los escasos ramalazos eléctricos del disco, con un solo de guitarra pausado, con mucho sentimiento, que deja paso a unos teclados grandilocuentes y lúgubres. The Racing Heart nos regala uno de los mejores estribillos del disco, que sobresale con fuerza en medio de un corte pausado donde nuevamente los sintetizadores ganan mucho protagonismo. Buildings es una composición sumamente evocadora, con unas guitarras acústicas tremendamente melancólicas. Leech es un corte tormentoso con un aire ligeramente circense. Ambitions es una de mis favoritas del disco, lúgubre, opresiva por momentos, con la segunda y última concesión eléctrica del disco, con otro pausado solo de guitarra precioso, una canción sublime. Undo You es una de las piezas más atmosféricas del disco. Lethean comienza con un piano que de forma pausada introduce una canción épica por momentos, con el mejor estribillo del disco, preciosa, sublime. En First Prayer nos encontramos algunas de las guitarras acústicas más enérgicas del disco. Se cierra esta joya musical con Dead Letters, otra maravilla con unas guitarras acústicas nuevamente con mucho protagonismo y Renkse completando la exhibición hasta el final. Es muy difícil encontrar un disco en el que todas y cada una de sus canciones mantengan en todo momento un nivel tan alto, aportando infinitos matices al conjunto. El trabajo a nivel instrumental es impecable, variado, profundo, tejiendo una sublime atmósfera con infinidad de capas. La portentosa demostración vocal de Jonas Renkse redondea un disco glorioso.Completan el trabajo una letras retorcidas, tan oscuras como la propia música, difíciles de entender por momentos. Dethroned & Uncrowned supone el triunfo definitivo de la melancolía y la tristeza como formas de arte, una maravillosa obra oscura, perturbadora, opresiva por momentos, dotada de una belleza y complejidad como solo estos genios son capaces de conseguir. El mejor disco que he disfrutado en mucho, mucho tiempo.

 

TRACKLIST:                                                   FORMACIÓN

1.-THE PARTING                                          JONAS RENKSE: Voces, guitarras, teclados  

2.-THE ONE YOU ARE LOOKING               ANDERS NYSTROM: Guitarras,  Voces

     FOR IS NOT HERE                                                                              Teclados

3.- HYPNONE                                                 PER ERIKSSON: Guitarras, teclados

4.-THE RACING HEART

5.-BUILDINGS

6.-LEECH

7.-AMBITIONS

8.-UNDO YOU

9.-LETHEAN

10.-FIRST PRAYER

11.-DEAD LETTERS                   

 

DISCOGRÁFICA                                                            FECHA DE LANZAMIENTO          

 KSCOPE                                                                         SEPTIEMBRE 2013

 

 Vamos a disfrutar con el video de Lethean, una de mis canciones favoritas de este portentoso trabajo. Si el disco en su totalidad me tiene completamente enganchado, esta increíble composición me ha seducido totalmente como hacía tiempo que no conseguía canción alguna. Musicalmente soberbia, con una combinación de penumbra y épica gloriosa, Renkse brutal a las voces, y unas letras fenomenales, esta maravilla supone una pequeña muestra de la obra de arte que es Dethroned & Uncrowned. El vídeo está reciclado de la versión de Lethean de Dead End Kings. Sublime composición.

 

 

Con obras tan soberbias como esta se confirma mi teoría de que la música es el verdadero alimento del alma. Un disco increíble, tan bello como oscuro, triste, melancólico, dotado de una profundidad y complejidad de la que pocas obras pueden hacer gala. Si ahora mismo tuviera que recomendar un disco a cualquier amante de la buena música, sería esta oscura joya sin duda. Katatonia son una banda imprescindible en el panorama musical actual, y con este lanzamiento refuerzan su posición de privilegio en la vanguardia musical. Disco de obligada escucha para todos. Obras como estas justifican sobradamente mi decisión de entregar mi corazón a la música que amo. Y en este caso que nos ocupa, mi estimado lector constante, debo compartir contigo que la música triste me reconforta, pues me ayuda a no sentirme solo...